El libro de Nahum es uno de los libros proféticos del Antiguo Testamento y presenta un mensaje de juicio divino contra la ciudad de Nínive, capital del Imperio Asirio. Nahum anuncia que el juicio de Dios está cerca y traerá justicia a las naciones.
En medio de este mensaje de juicio, encontramos un versículo consolador en Nahúm 1:7, que dice: Jehová es bueno, refugio en tiempos de angustia. Cuida de los que confían en él.
Este versículo destaca la bondad de Dios y cómo Él es un refugio seguro para aquellos que confían en Él en tiempos de angustia. En este estudio bíblico, profundizaremos en esta verdad y descubriremos cómo podemos confiar en Dios en tiempos de dificultad.
Dios es bueno
El primer punto que debemos señalar es que Dios es bueno. Nahum 1:7 comienza con esta verdad fundamental. Cuando enfrentamos tiempos difíciles, es fácil cuestionar si Dios es bueno o si se preocupa por nosotros. Pero la Biblia es clara: Dios es bueno y se preocupa por nosotros.
El Salmo 34:8 dice: “Gustad, y ved que es bueno Jehová. ¡Cuán feliz es el hombre que se refugia en él!”
Este versículo nos anima a experimentar la bondad de Dios por nosotros mismos. Cuando probamos a Dios, descubrimos que Él es bueno y que podemos confiar en Él.
Además, Santiago 1:17 nos recuerda que toda buena dádiva viene de Dios: “Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en quien no hay variación ni sombra que cambie”.
Todo lo que es bueno en nuestra vida viene de Dios, incluso en tiempos difíciles. Incluso cuando no podemos ver la bondad de Dios, podemos confiar en que Él es bueno y obra para nuestro bien.
Dios es un refugio seguro
Nahum 1:7 también nos dice que Dios es un refugio en tiempos de angustia. Él es un lugar seguro donde podemos refugiarnos cuando enfrentamos dificultades.
El Salmo 46:1-3 dice: “Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones. Por tanto, no temeremos, aunque la tierra cambie, y aunque los montes se trasladen al medio de los mares. Aunque las aguas bramen y se turben, aunque los montes se estremezcan con su furor. (Sillín.)»
Este Salmo nos recuerda que Dios es un refugio seguro en tiempos de caos e incertidumbre. No importa lo que suceda a nuestro alrededor, podemos encontrar seguridad y protección en Dios.
Además, Proverbios 18:10 dice: “Torre fuerte es el nombre del Señor; a ella correrán los justos, y estarán en alto refugio.”
El nombre del Señor es poderoso y puede protegernos de los peligros de este mundo. Cuando enfrentamos dificultades, podemos correr hacia Dios y encontrar seguridad en Su nombre poderoso.
Dios cuida de los que confían en él
El final de Nahúm 1:7 nos dice que Dios cuida de los que en Él confían. Cuando confiamos en Dios en medio de la dificultad, podemos estar seguros de que Él nos está cuidando.
El Salmo 91:1-2 dice: “El que habita al abrigo del Altísimo, a la sombra del Omnipotente reposará. Diré del Señor: Él es mi Dios, mi refugio, mi fortaleza, y en él confiaré”.
Este Salmo nos anima a confiar en Dios y encontrar refugio en Él. Cuando confiamos en Dios, podemos descansar en Su protección y cuidado.
Además, Jesús nos recuerda en Mateo 6:25-26 : “Por eso os digo, no os preocupéis por vuestra vida, qué comeréis o qué beberéis; ni de vuestro cuerpo, qué vestiréis. ¿No es la vida más que el alimento y el cuerpo más que el vestido? Mirad las aves del cielo, que ni siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial les da de comer. ¿No eres mucho más valioso que ellos?»
Este versículo nos enseña que podemos confiar en que Dios suplirá nuestras necesidades básicas. Cuando confiamos en Dios, podemos estar seguros de que Él cuidará de nosotros, tal como cuida de las aves del cielo.
Confiando en Dios en Tiempos de Angustia
Ahora que entendemos que Dios es bueno, un refugio seguro y se preocupa por aquellos que confían en Él, exploremos cómo podemos confiar en Dios en tiempos de dificultad.
Buscando a Dios en la Oración
Una de las formas más importantes de confiar en Dios en tiempos de dificultad es buscarlo en oración. Filipenses 4:6-7 dice: “Por nada se preocupen, sino presenten sus peticiones a Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.”
Este versículo nos anima a llevar nuestras preocupaciones a Dios en oración. Cuando buscamos a Dios en oración, podemos experimentar la paz que sólo viene de Él.
Meditando en la Palabra de Dios
Otra forma de confiar en Dios en tiempos de problemas es meditar en la Palabra de Dios. El Salmo 119:105 dice: “Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino”.
La Palabra de Dios nos guía en nuestras vidas y nos da esperanza en tiempos de dificultad. Cuando meditamos en la Palabra de Dios, podemos encontrar fuerza y valor para enfrentar nuestros desafíos.
Confiar en Dios incluso cuando no entendemos
Finalmente, es importante recordar que podemos confiar en Dios aun cuando no entendamos lo que sucede a nuestro alrededor. Proverbios 3:5-6 dice: “Fíate de Jehová con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia; reconoce al Señor en todos tus caminos, y él enderezará tus veredas”.
Este versículo nos anima a confiar en Dios en todas las áreas de nuestra vida y no depender de nuestro propio entendimiento. Incluso cuando no entendemos lo que está pasando, podemos confiar en Dios para que guíe nuestros caminos y los enderece.
Conclusión
En resumen, el libro de Naum 1:7 nos enseña que Dios es bueno, es refugio seguro y cuida de los que en Él confían. Podemos confiar en Dios en tiempos de dificultad buscándolo en oración, meditando en Su Palabra y confiando en Él incluso cuando no entendemos lo que está pasando. Cuando confiamos en Dios, podemos experimentar la paz que sólo viene de Él y encontrar la fuerza y el coraje para enfrentar nuestros desafíos.
Que confiemos en Dios en todas las áreas de nuestra vida y encontremos la paz que sólo viene de Él. Que el Señor nos guíe en nuestros caminos y nos ayude a enderezar nuestros caminos. En el nombre de Jesús, amén.